En verano, muchas personas quieren lograr un bronceado hermoso, pensando que la piel bronceada es más bella y, sobre todo, creyendo que el protector solar nos impide alcanzar este objetivo.
¡Nada podría estar más equivocado! El protector solar es esencial, nuestra piel o bronceado no puede protegernos de los rayos nocivos del sol, como los rayos UVA y UVB, y el color que realmente tomamos es la oxidación de nuestra melanina, que interviene precisamente para defendernos.
Estudios recientes han demostrado que algunos protectores solares presentes en las cremas pueden atravesar el estrato córneo (la parte más superficial de nuestra piel) hasta la sangre. Todavía no hay estudios científicos sobre el daño real de esta consecuencia, pero hay varios sobre la prevención de los cánceres por el uso de protección. Evitar las quemaduras solares previene el melanoma, el protector solar es esencial y debe elegirse en función de nuestro tipo de piel.
Un uso correcto del protector solar requiere que aplique la crema antes de la exposición al sol, preferiblemente, por lo tanto, cuando todavía estamos en casa, aproximadamente 15-20 antes. La cantidad correcta para un adulto es de aproximadamente 30gr para todo el cuerpo, 2gr solo para la cara. Es importante volver a aplicarlo con frecuencia, como máximo cada dos horas o después de cada baño. La mayoría de las personas se queman porque no ponen la cantidad correcta de crema o porque no la vuelven a aplicar a menudo durante el día, estos datos han surgido de estudios científicos.
Según nuestra piel o cualquier problema que podamos sufrir, podemos elegir el tipo de protector solar para nosotros y su formulación. Nuestras cremas están formuladas solo con filtros minerales, contienen óxido de zinc y dióxido de titanio, que tienen una fuerte acción antiinflamatoria, útil para las personas con piel delicada o problemática. Además, se aprueba una crema formulada solo con filtros minerales (físicos) que nos brinda una protección mayor y más uniforme debido a que al ser menos líquida que una con filtros químicos, nos permite colocar la capa correcta siendo más compleja ya que propagar.
También hay una indicación de no exponerse en las horas intermedias y confiar en mí, con la protección bronceará aún más, el color será más duradero, no tendrá erupciones o descamación y, sobre todo, evitará el riesgo de desarrollar melanomas en el futuro, que tienen un incidencia aún mayor en los primeros 18 años de exposición al sol y quemaduras solares.